martes, 10 de febrero de 2009

Ser


No culpes a nadie, nunca te quejes de nada ni de nadie porque fundamentalmente tú has hecho tu vida. Acepta la responsabilidad de edificarte a ti mismo y el valor de acusarte en el fracaso para volver a empezar corrigiéndote. El triunfo del verdadero hombre surge de las cenizas del error. Nunca te quejes del ambiente o de los que te rodean, hay quienes en tu mismo ambiente supieron vencer las circunstancias, sean buenas o malas según la voluntad o fortaleza de tu corazón. Aprende a convertir toda situación difícil en un arma para luchar. No te quejes de tu pobreza de tu soledad o de tu suerte, enfrenta con valor y acepta que de una u otra manera todo dependerá de ti, no te amargues con tu propio fracaso ni se lo cargues a otro, acéptate ahora, o seguirás justificándote como un niño? Recuerda que cualquier momento es bueno para comenzar y que ninguno es tan terrible para claudicar. Deja ya de engañarte, eres la causa de ti mismo, de tu necesidad, de tu dolor, de tu fracaso. Si tú has sido el ignorante, el irresponsable, tú únicamente tú, nadie te empujo a los aconteceres causante de tus errores. Deja de penar por ti, levanta la cabeza y aprende de esos errores. No olvides que la causa de tu presente es tu pasado como la causa de tu futuro es tu presente.
Aprende de los fuertes de los audaces, imita a los enérgicos, a los vencedores, a quienes no aceptan situaciones, a quienes vencieron a pesar de todo. Piensa menos en tus problemas y más en tu trabajo y tus problemas sin alimento morirán. Aprende a nacerte desde el dolor y a ser más grande que el más grande de los obstáculos. Mírate en el espejo de ti mismo. Comienza a ser sincero contigo mismo. Reconocete por tu valor, por tu voluntad asi como tambien reconoce tus debilidades para justificarte. Reconócete dentro de ti mismo, más libre y fuerte y dejarás de ser un títere de las circunstancias. Tu mismo eres tu destino. Y nadie puede sustituirte en la construcción de tu destino. Levántate mira las mañanas y respira la luz del amanecer. Tú eres parte de la fuerza de la vida. Ahora despierta, camina, lucha. Decídete y triunfarás en la vida. Nunca pienses en la suerte, porque la suerte es el pretexto de los fracasados. No digas todo lo que sabes, no hagas todo lo puedes, no creas todo lo que oyes, no gastes todo lo que tienes; Porque : el que dice todo lo que sabe, el que hace todo lo que puede, el que cree todo lo que oye, el que gasta todo lo que tiene; Muchas veces: dice lo que no conviene, hace lo que no debe, juzga lo que no ve, gasta lo que no puede


YO QUIERO SER
Yo quiero ser una mujer, consciente del privilegio y milagro de la vida … de sentir que tengo, todo el derecho a VIVIR y disfrutar lo que ella me ofrece…
Yo quiero ser alguien, para agradecer y retribuir, todas les bendiciones que Dios me ha dado…
Yo quiero ser FELIZ siendo yo misma, sin máscaras, sin sentimientos de culpa, conforme a mi vocación, a mi misión y a mis sueños…
Yo quiero tener el coraje de ser y sentirme libre, para elegir mis caminos, vencer mis miedos y temores, y asumir las consecuencias de mis actos…
Yo quiero tener alegría para reír, para hacer y recorrer mi camino a la felicidad, para sentir la energía de VIVIR plena e intensamente…
Yo quiero sentir, ser una mujer COMPLETA, amarme, reconocer que soy única, irrepetible e irreemplazable; que valgo, porque Dios ha instalado en mí, una LUZ divina y porque en mi interior hay mucho para DAR…
Yo quiero hacer conciencia, de que nadie puede lastimarme, a menos que yo lo permita; que nadie puede agredirme porque no lo merezco…
Yo quiero ser LUZ para mi SOL, mi familia y mis hijos, porque así, les ayudaré a crecer, sin miedos y con responsabilidad.
Yo quiero dejar de ser y sentirme víctima, para retomar o tomar por primera vez en mi VIDA, la capacidad de autogobernarme, de ser protagonista de mi historia…
Yo quiero AMAR el presente, elegir el futuro y luchar para hacerlo, con el corazón sin renunciarme, ni cansarme jamás…
Yo quiero recordar el pasado, pero no vivir en EL, para aprender a no cometer los mismos errores.
Quiero soñar con un futuro brillante, lleno de estrellas; sin dejar de vivir y disfrutar mi presente, teniendo plena conciencia, que lo único seguro, es el hoy, el aquí y el ahora…Yo quiero perdonarme mis errores, mis culpas, mis caídas y liberar la carga, para hacer más liviano mi caminar, hacia una VIDA NUEVA…
Yo quiero, todos los días de mi vida, en esta dimensión, agradecer cada instante de aliento, cada sonrisa, cada lágrima, cada amigo que me ha dado la mano en mi peregrinaje; cada experiencia vivida, que me han hecho SER quien soy, con mis defectos y virtudes.
Y ... solo podre ser lo que anhelo ser, siendo yo misma.


Un día le pedí a Dios instruccciones para vivir en esta tierra. Dios acercó su voz a mi oido y me dijo:
"Sé como el sol, levántate temprano y no te acuestes tan tarde.
Sé como la luna, brilla en la oscuridad, pero sométete a la luz mayor.
Sé como los pájaros, come, canta y vuela.
Sé como las flores, enamoradas del sol pero fieles a sus raices.
Sé como el buen perro, obediente, pero solo a su amo.
Sé como la fruta, bella por fuera, saludable por dentro.
Sé como el día, que llega y se retira sin alardes.
Sé como la luciérnaga, que, aunque pequeña, emite su propia luz.
Sé como el agua, buena y transparente.
Y por sobre todas las cosas sé como el cielo muy grande.
Señor, no permitas que me quede donde estoy, ayúdame a llegar a donde tú esperas que llegue".

viernes, 6 de febrero de 2009

domesticando mis animales


Se cuenta lo siguiente de un viejo anacoreta o ermitaño, es decir, una de esas personas que por amor a Dios se refugian en la soledad del desierto, del bosque o de las montañas para solamente dedicarse a la oración y a la penitencia. Se quejaba muchas veces que tenía demasiado que hacer. La gente no entendía cómo era posible que tuviera tanto trabajo en su retiro. A lo que les contestó: "Tengo que domar a dos halcones, entrenar a dos águilas, mantener quietos a dos conejos, vigilar una serpiente, cargar un asno y someter a un león. No vemos ningún animal cerca de la cueva donde vives. ¿Dónde están todos estos animales? Entonces el ermitaño dio una explicación que todos comprendieron. Estos animales los llevamos dentro: Los dos halcones, se lanzan sobre todo lo que se les presenta, bueno y malo. Tengo que entrenarlos para que sólo se lancen sobre presas buenas... Son mis OJOS Las dos águilas con sus garras hieren y destrozan. Tengo que entrenarlas para que sólo se pongan al servicio y ayuden sin herir... Son mis MANOS Y los conejos quieren ir adonde les plazca, huir de los demás y esquivar las situaciones difíciles. Tengo que enseñarles a estar quietos aunque haya un sufrimiento, un problema o cualquier cosa que no me gusta... Son mis PIES Lo más difícil es vigilar la serpiente aunque se encuentra encerrada en una jaula de 32 varillas. Siempre está lista por morder y envenenar a los que la rodean apenas se abre la jaula, si no la vigilo de cerca, hace daño... Es mi LENGUA El burro es muy obstinado, no quiere cumplir con su deber. Pretende estar cansado y no quiere llevar su carga de cada día... Es mi CUERPO Finalmente necesito domar al león, quiere ser el rey, quiere ser siempre el primero, es vanidoso y orgulloso... Ese... es mi CORAZÓN
(desconozco su autor)